Quinta expedición: Cerdaña y Tours (731-733)

(Batalla de Poitiers, 733)

Anbasa fue sustituido por Yahya, el quinto gobernador de Al-Andalus, que se dedicó por tres años a tareas fiscales. En el 728 fue reemplazado por Hudhaifa, quien inauguraría junto con sus dos sucesores un periodo de profunda inestabilidad que duró tres largos años de rencillas civiles. Por fin, en el 731, un natural del país llamado Abd Al-Rahman Al-Gafiqi fue nombrado como noveno gobernador de Al-Andalus. Apaciguado el territorio, reanudó las campañas contra los francos. Para ello aprovechó como excusa la rebelión de los bereberes de las guarniciones fronterizas del Pirineo.

Debido quizás al mal trato que los jueces árabes daban a los bereberes del Norte de África y que había motivado de alguna manera el levantamiento egipcio de 725, las guarniciones bereberes de los Pirineos al mando de uno de los suyos llamado Munuza se rebelaron contra Córdoba en el año 731. Munuza hizo un pacto con Eudes, el Duque de Aquitania, quien le entregó su hija en matrimonio para reafirmar la alianza. A cambio, y como primera medida, las tropas bereberes de Munuza atacaron la ciudad de Urgel y mataron a su obispo Nambaudo.

Abd Al-Rahman, nombrado gobernador no se sabe si antes o después del levantamiento bereber, atacó a Munuza antes de que éste estuviese preparado y lo sitió en una ciudad de la Cerdaña, posiblemente Llivia. Munuza logró escapar, pero se cayó del caballo en un momento dado, dió contra unas peñas y murió. Abd Al-Rahman capturó a su esposa, la hija del duque Eudes, y la envió a Damasco como regalo para el Califa Hixám. A continuación se dispuso a atacar la Aquitania como escarmiento y represalia.

Para ello comenzó a avanzar hacia la ciudad de Burdeos. Eudes le presentó batalla en algún lugar del río Garona, pero fué derrotado sufriendo una gran mortandad entre sus tropas. Humillado, el Duque de Aquitania se ve obligado a solicitar ayuda a su rival político Carlos Martel. Mientras tanto el ejército árabe se dirigía hacia Tours saqueando cuanto encontraba a su paso. Carlos Martel, Mayordomo de Palacio, pudo proteger Tours y alcanzar en octubre de 733 al ejército árabe en una vía romana en un lugar situado a 20 kilómetros al noroeste de Poitiers y que corresponde al actual pueblo de Moussais-la-Bataille.

Durante siete días los dos ejércitos estuvieron observándose frente a frente. En la batalla que siguió, el gobernador Abd Al-Rahman resultó muerto. Al llegar la noche e interrumpirse la lucha, los árabes aparentaron tomar medidas para continuar la batalla al día siguiente, pero decidieron abandonar el campo ordenadamente amparados por la obscuridad. Al día siguiente, los francos decidieron no perseguirlos, pues estaban recelosos por la posibilidad de sufrir alguna emboscada por parte de tan poderoso adversario, y se contentaron con el rico botín encontrado en el campamento árabe.

La fecha tradicional de la batalla de Poitiers es octubre de 732. Sin embargo, según la Crónica de 754, está equivocada ya que el califa Hixam nombró sucesor de Al-Gafiqi a primeros de 734. Como no es de recibo creer que Al-Andalus estuvo todo un año largo sin gobernador, conviene fechar la batalla de Potiers en octubre de 733.